En un juicio abreviado que se realizó este lunes en el Centro de Justicia Penal de Rosario, Andrés «Andy» Caminos, sobrino de ex jefe de la barra de Newell’s Roberto «Pimpi» Caminos, fue condenado por tres asesinatos y una tentativa de homicidio. Caminos deberá cumplir una condena de 26 años de prisión efectiva.
Durante el juicio, que estuvo a cargo de los jueces Hernán Postma, María Carrara y Hebe Marcogliese, Caminos fue encontrado culpable en cuatro hechos que tuvieron lugar entre 2016 y 2018.
Caminos fue imputado por homicidio agravado por el uso de arma de fuego en carácter de partícipe primario por la muerte Carlos Leonel Juárez, quien falleció el 25 de diciembre de 2016 en Lamadrid al 100 tras recibir varios disparos.
Además, se lo imputó por homicidio calificado con el concurso premeditado de dos o más personas y para procurar la impunidad para otro, en calidad de partícipe secundario, por el hecho ocurrido el 16 de diciembre de 2016 en Vera Mujica 2900. Caminos, junto otras tres personas, se apersonó en el domicilio de la víctima Lorena Ojeda de 16 años y efectuaron al menos 6 disparos de arma de fuego, impactándole dos de ellos en zona del tórax para luego darse a la fuga.
Por otra parte, se le imputó el hecho ocurrido en fecha 19 de abril del 2018 en calle Dinamarca 500, cuando el imputado determinó a otra persona para que colabore con homicidio de la víctima Cristian Javier Reynoso, resultando además dos personas heridas de arma de fuego. Por este hecho, también fue acusado de homicidio calificado con el concurso premeditado de dos o más personas y para procurar la impunidad para otro, en calidad de partícipe secundario.
Finalmente, se le imputó el delito de homicidio agravado por el uso de fuego en grado de tentativa, en concurso real con el delito de robo calificado por uso de arma de fuego no hallada por un hecho ocurrido el 29 de noviembre del 2016 en Lamadrid al 100 bis. El condenado junto a otras 3 personas, mantuvo encerrado a la víctima J. S en un inmueble tipo departamento de dicha zona y bajo amenazas, le dispararon en el rostro para luego sustraerle dinero y darse a la fuga.