Doce organizaciones de la sociedad civil dedicadas a prevenir enfermedades del tabaquismo presentarán el martes en el Congreso más de 800.000 firmas para que los legisladores pongan en vigencia el Convenio Marco de Control de Tabaco de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que ya fue ratificado por 181 países.
«Que el Parlamento argentino ponga en vigencia el convenio indicaría que hubo una toma de conciencia real de la epidemia del tabaquismo en el mundo y sería, además, cumplir con una de las regulaciones de la OMS y con la que Argentina todavía está en mora», dijo la diputada nacional por la Ciudad de Buenos Aires del PRO, Cornelia Schmidt Liermann, que el martes presentará un proyecto para promover cultivos sustitutos del tabaco.
En 2003 la OMS presentó un convenio marco para el control del tabaco «por la dimensión de la epidemia del tabaquismo» con una serie de regulaciones que proyectan reducir un 30% los fumadores para 2025 y que fue ratificado por 180 países, incluyendo la Unión Europea, los principales productores de tabaco (China, Brasil, la India, Turquía), casi toda América Latina y todo el Mercosur, excepto Argentina, a pesar de sus 43.000 muertes anuales por tabaquismo.
«El gran tema no es sólo de aquel que consume y fuma -indicó Smchmidt- sino de los fumadores pasivos y ahí tenemos una gran cantidad de niños que nos preocupan».
En 2004, el Poder Ejecutivo envió al Parlamento un proyecto de ley para ratificar el convenio y su vigencia. Pero no fue tratado y perdió estado parlamentario.
Hoy, según cifras de Fundación Sales, en el mundo 9 millones de personas mueren por año de cáncer y el tabaco, su causa principal, provoca otras enfermedades que ocasionan la muerte de otros 7 millones de fumadores, 900 mil como fumadores pasivos, entre ellos niños.
Dentro de sus regulaciones, la OMS sugiere aplicar cultivos sustitutos del tabaco. Por ello, la diputada Schmidt Liermann, presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores y Culto, presentará un proyecto de ley para promover éste y otros cultivos sustitutos del tabaco.
«No quiere decir que no se va a cultivar ni cosechar más tabaco, sino buscar alternativas entendiendo que está bajando la demanda 1 por ciento anual y que, tarde o temprano, vamos a tener que pensar en otros cultivos que lo reemplacen. Y en ese caso el bambú es el más indicado», apuntó.
Consultada sobre el proyecto de ley que presentará mañana, acompañando a las organizaciones que impulsaron la campaña de firmas, Schmidt Liermann destacó que si bien todavía no hay una fecha prevista para ingresarlo formalmente al parlamento el objetivo principal es «visibilizar el tema y fomentar la reconversión de la producción de tabaco al bambú».
«Para nosotros es importante desarrollar políticas públicas que trasciendan al gobierno de turno -apuntó- y necesitamos trabajar en forma preventiva viendo que va disminuyendo la demanda del tabaco».
En ese sentido, destacó la importancia de «pensar en un cultivo que se pueda usar en la misma tierra, que sea sustentable, sostenible y de gran demanda. Y el bambú es espectacular porque hay mucha demanda y tendríamos mucha oportunidad de exportarlo al mundo asiático además de darle valor agregado acá».
Mañana, además, el Secretario de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva, Lino Barañao, presentará los beneficios del bambú en la reunión y María Emilia Caro, embajadora del bambú en la Argentina, de la World Bamboo Organization, expondrá los exitosos resultados de este cultivo y su industrialización, poco conocida en el país.
También participarán los científicos Alejandro Mentaberry y Fernando Bravo Almonacid, que explicarán cómo lograron producir proteínas de uso medicinal en plantas de tabaco y se invitó a los Secretarios de Salud, de Agroindustria y de Medio Ambiente, por estar involucrados en el tema.