El Vaticano desautorizó hoy al ex nuncio en España por sus recientes declaraciones en las que afirmó que el gobierno del socialista Pedro Sánchez había resucitado al dictador Francisco Franco con su decisión de exhumarlo del Valle de los Caídos.
Las palabras de monseñor Renzo Fratini, cuyo mandato finalizó el pasado 22 de junio, fueron «expresadas a título personal», aseguró la Santa Sede en un comunicado.
Tras un década como embajador del Papa en España, el nuncio, de 75 años, criticó con dureza la decisión del Ejecutivo del Partido Socialista (PSOE) por su decisión de exhumar a Franco, una media que da cumplimiento a la ley de Memoria Histórica del país.
«Sinceramente, hay tantos problemas en el mundo y en España ¿Por qué resucitarlo? Yo digo que han resucitado a Franco. Dejarlo en paz era mejor», dijo Fratini en una entrevista antes de dejar su cargo.
Luego de las polémicas palabras del nuncio, el gobierno español reclamó al Vaticano que aclarara si respaldaba la postura de Fratini, que consideró «inaceptable» para un representante diplomático.
«Creemos que ha sido rota la neutralidad con la que las legaciones diplomáticas tienen que actuar. (…) Lo que se ha puesto en cuestión es una ley de los españoles, una ley de su Parlamento que es lo que el Gobierno está ejecutando y nos parece completamente inasumible», dijo la vicepresidenta del gobierno español, Carmen Calvo.
«Con motivo de la salida definitiva de España de monseñor Renzo Fratini, tras la conclusión de su mandato, subrayamos que sus recientes declaraciones sobre el tema de la exhumación de los restos mortales de Francisco Franco han sido expresadas a título personal», dijo el comunicado vaticano.
«Recordamos además que el ex Nuncio Apostólico en España ya ha desmentido, a través de la prensa, toda intención de emitir un juicio sobre cuestiones políticas internas», agregó.
Además, el director interino de la oficina de prensa del Vaticano, Alessandro Gisotti, recordó que la posición oficial de la Santa Sede sobre la exhumación de Franco ya fue expresada en la carta que el Secretario de Estado, Cardenal Pietro Parolin, envió el pasado mes de febrero a la vicepresidenta Calvo.
En dicha misiva, el Vaticano subrayaba que su posición «se basa en el pleno respeto de la soberanía del Estado español y de su sistema legal».
Desde su muerte en 1975, Franco se encuentra enterrado en una cripta en la basílica de la Santa Cruz del Valle de los Caídos.
Los restos yacen en un templo católico controlado por monjes benedictos, que forma parte de un monumento al fascismo construido por orden del propio dictador, enterrado junto a los cuerpos de miles de sus víctimas.
El prior del Valle de los Caídos, Santiago Cantera, fue uno de los principales aliados de la familia Franco en su estrategia obstruccionista frente a las intenciones del gobierno español de exhumar al dictador.