Un grupo internacional de científicos encontró, en una cantera de piedra en Brasil, un lirio fosilizado que creció hace unos 115 millones de años y está completamente preservado.
Se trata de una planta de 40 centímetros, lo que incluye las raíces, flor e incluso sus células individuales. Los investigadores creen que originalmente creció a lo largo de las orillas de un lago de agua dulce, cerca de la actual ciudad de Crato, en el noreste brasileño. Los expertos han llamado a esta planta Cratolirion bognerianum y señalan que habría sido una de las primeras especies con flores en evolucionar.
El lirio muestra casi todas las características típicas de las plantas monocotiledóneas, tales como hojas estrechas con nervaduras paralelas, flores triples y raíces fibrosas, que condujeron a su identificación. La buena preservación del fósil permitió su óptima evaluación, que fue realizada a través de análisis en tercera dimensión, rayos X y una tomografía digitalizada.
Muchas plantas de floración dicotiledóneas tempranas han sido halladas y estudiadas en los mismos sedimentos del antiguo lago en Crato, incluyendo lirios de agua, gordolobos, magnolias resistentes a la sequía y algunos parientes de la pimienta y el laurel. Pero en contraste con otras plantas con flores de la misma edad, halladas en Estados Unidos, Portugal, China y Argentina, las de Crato son inusualmente diversas. Según los científicos, esto podría deberse al hecho de que el lago se encontraba en las latitudes más bajas.
El botánico Clement Coiffard, del Museo de Historia Natural de Berlín (Alemania) y responsable del hallazgo, señala que este descubrimiento permitirá alcanzar una nueva mirada acerca del papel desempeñado por los trópicos en el desarrollo de plantas con flores. Los detalles del hallazgo fueron publicados en la revista Nature Plants.