El Tribunal Supremo de Francia anuló este viernes la decisión de una corte de apelación de ordenar que se reanudara la alimentación e hidratación artificial del enfermero francés Vincent Lambert, hospitalizado en estado vegetativo desde hace más de diez años. El caso se convirtió en símbolo del debate sobre la eutanasia en el país y mantiene enfrentada a su familia
Vincent Lambert quedó tetrapléjico luego de un accidente de moto en el 2008. Sus padres, Pierre y Viviane, han luchado ante los tribunales franceses desde el año 2013 para mantenerlo con vida; en cambio, su esposa Rachel, tutora legal –apoyada por los hermanos de Vincent– pedían que se le desconecten los soportes vitales.
La decisión del Supremo, señala EFE, llega tras el recurso presentado por el gobierno francés y el hospital de Reims, en el que Lambert, antiguo enfermero de 42 años, está ingresado. Por su parte los abogados de los padres de Lambert amenazan con una denuncia por «asesinato» en caso de que se ponga fin a la conexión que lo mantiene con vida.