Por José Odisio
La llegada de Santiago Gentiletti cambió el ánimo de los hinchas que reclamaban por la llegada de refuerzos más que el propio Kudelka. El ex defensor de Lazio y San Lorenzo reúne características que el DT leproso quería para el puesto, pero lo que es mejor, cayó muy bien en el hincha, un respaldo necesario para arrancar con tolerancia en un torneo donde la angustia crispará los nervios.
De pronto, Gentiletti provocó unos días de optimismo, que se acrecentó al conocerse una gestión para traer a Federico Lértora y la noticia de que Maxi Rodríguez no se perderá partidos por ir a los Panamericanos (aunque irá el pibe Moreno).
«Si los refuerzos demoran pero son buenos como Gentiletti o Lértora no importa esperar un poco», deslizan los hinchas en redes sociales. Y esa idea es la misma de Kudelka. El DT se muestra tranquilo porque insiste con los directivos en buscar calidad y no celeridad. Obvio que lo mejor sería combinar ambas cosas, pero en un receso largo y con poco ‘cash’ encima, más no se puede pedir.
Será responsabilidad de los directivos que esta estela de buen ánimo perdure. Cerrar con Lértora sería importante. Confirmar la continuidad de Formica también. Y apuntar con precisión a los otros refuerzos que faltan, en especial el nueve. Porque en este mercado tan importante, esperar un poco no importa, pero fallar no está permitido.