La detención del jefe del Servicio de Inmunología y Reumatología del Hospital Garrahan se produjo el martes 28 de mayo pero la investigación en su contra por tenencia y distribución de pornografía infantil comenzó nueve meses atrás. La pesquisa, que se inició en los Estados Unidos y tiene ramificaciones en Brasil y la Argentina, avanzó en silencio en la Fiscalía Especializada en Delitos Informáticos de la Ciudad a cargo de Daniela Dupuy y tuvo sus primeros resultados en noviembre de 2018, fecha en la que se realizaron 40 allanamientos en simultáneo. El operativo incluyó, además de la casa del médico, propiedades en 10 provincias del interior.
Ese día se encontraron en las viviendas allanadas una importante cantidad de elementos tecnológicos utilizados para la elaboración y distribución de la pornografía infantil. El listado incluye 91 pendrives; 99 discos rígidos; 36 discos portátiles; 23 memorias RAM; 4228 CDs, DVDs y discos blue ray; 66 CPU; 55 notebooks; 26 tablets; 76 casettes VHS; 11 cámaras fotográficas; nueve plantas de marihuana y cinco armas de fuego (dos pistolas, dos revolver y una escopeta). El contenido total alcanzó los 3 terabytes, según publicó TN.
De acuerdo a la información preliminar, el profesional de la salud tenía en su poder 135 videos con material sexual explícito de nenes, aunque los peritajes indicarán si el número es mayor. De hecho, se pudo saber que en la casa se encontraron algunas pistolas.
En el interior del país, la Gendarmería Nacional secuestró elementos electrónicos en las provincias de Catamarca, Chaco, Entre Ríos, La Pampa, Mendoza, Río Negro, Santa Fe, La Rioja y Santiago del Estero. A estas se suman 16 operativos en el territorio bonaerense. Los procedimientos estuvieron a cargo de la Dirección de Investigación Criminal de esa fuerza.
Además, un joven de 23 años fue detenido en Río Tercero, Córdoba, aunque por el momento se desconoce su rol en la organización. La causa se originó por un reporte internacional elaborado por el Centro Nacional para Niños Desaparecidos y Explotados de Estados Unidos, donde se identificó y alertó sobre una posible distribución y tráfico de importante cantidad de imágenes con contenido sexual de niños.
El acusado se negó a declarar y continuará detenido con prisión preventiva. Las malas noticias para el pediatra no terminaron allí: su abogado renunció y ahora enfrentará el proceso con un defensor oficial.