El interés de Central por Néstor Ortigoza no es nuevo. Desde hace uno o dos mercados de pases su nombre venía retumbando por los pasillos de Arroyito pero nunca podía concretarse. Claro, hasta este viernes. El ex San Lorenzo pasó con éxito la revisión médica y se convirtió en el primer refuerzo canalla para este 2018 que se avecina.
📹 ¡@negroortigoza ya es Canalla! Así se presenta el nuevo volante auriazul ante todos los hinchas de Central pic.twitter.com/G8fY5WsEpi
— Rosario Central (@CARCoficial) December 29, 2017
Nacido hace 33 años en San Antonio de Padua, ciudad ubicada al oeste del Gran Buenos Aires, Ortigoza es dueño de un currículum interesante en el mundo del fútbol. Salió de Argentinos Juniors y llegó a jugar en Emiratos Árabes. Se nacionalizó paraguayo y se dio el lujo de jugar en el Mundial de Sudáfrica 2010.
Su pasado inmediato no fue el mejor. Llega a Central luego de pasar por Olimpia de Paraguay, donde no logró alcanzar el nivel que tanto esperaba y con el que se lo pudo ver en San Lorenzo. Hubo críticas de muchos hinchas y de varios sectores dela prensa hacia Ortigoza debido a su físico, pero él mismo consideró que se siente “muy feliz” de poder empezar una pretemporada desde el comienzo en el Canalla.
“Voy a dar todo. Sé que los hinchas acá son muy pasionales y muy fieles. Voy a trabajar duro para devolverles en la cancha todo el cariño que me están dando desde el primer momento”, señaló el mediocampista en diálogo con el sitio oficial canalla.
¿Qué rol va a cumplir en el equipo de Leo Fernández, que tendrá como objetivo de máxima la Copa Sudamericana? Eso va a depender de cómo se mueva Central dentro de este mercado de pases. Si no hay mucho más para traer, Ortigoza jugará más adelantado, haciéndose eje a la hora de la creación de fútbol, y el 5 de contención seguirá siendo Maximiliano González, como lo fue en el tramo final de este 2017.
Le preguntaron a Ortigoza cuánto tuvo que ver el Colo Cetto en su llegada. “Y… mucho”, contestó el ex capitán del Ciclón. Los dos se conocen de San Lorenzo y hay una buena relación, lo que empujó al mediocampista a sellar de una buena vez su vínculo con Central y arrancar el 2018 vestido de azul y amarillo.