El líder de la misión del FMI para la Argentina, el italiano Roberto Cardarelli, consideró este lunes que es «demasiado temprano» para sentarse a renegociar el préstamo stand- by para el país, previsto en tres años hasta mediados de 2021.
Cardarelli se pronunció así luego de reunirse con la plana mayor de la CGT en la sede del sindicato de la construcción de la UOCRA, en el marco de su desembarco en Buenos Aires para realizar la cuarta revisión trimestral del crédito que el FMI otorgó a la Argentina el año pasado.
«Lo peor ha pasado. El crecimiento debería mejorar y la inflación debería bajar en los próximos meses«, sostuvo el representante del FMI en declaraciones a la prensa luego de la reunión con los sindicalistas.
Consultado sobre cuándo cree que la economía argentina podría comenzar a retomar la senda del crecimiento, Cardarelli respondió: «El segundo trimestre, puede ser que el primero también. No fue tan malo como se podía esperar».
Respecto del encuentro con los popes de la CGT, el economista italiano señaló: «Todo bien, una reunión muy útil, como lo fue la otra vez. Hablamos de los problemas de la economía, de la inflación, del crecimiento y del trabajo».
Se trató de la tercera reunión que Cardarelli mantuvo con la cúpula cegetista desde que el gobierno recurrió al auxilio financiero del FMI, luego de las realizadas en agosto del año pasado y en febrero último en las que la central obrera planteó su preocupación sobre la caída de la economía y del empleo que le atribuyen a las recomendaciones del organismo internacional.
Ahora, los gremialistas insistieron en trasmitir al Fondo su preocupación por la pérdida de puestos de trabajo y por la caída del sector industrial que sigue sin repuntar, mientras que se quejaron de que no funcionó el decreto presidencial que obligaba a comunicar las cesantías en el Ministerio de Producción y Trabajo con diez días hábiles de anticipación.