La Fundación Cardiológica Argentina (FCA) desestimó este lunes que las pistolas Taser afecten al corazón de la persona que recibe la descarga, luego de que la semana pasada el gobierno nacional anunció que las fuerzas de seguridad incorporarán esta nueva arma en los próximos meses.
«Al momento no existe evidencia científica que registre muertes por fibrilación ventricular. Los decesos descriptos se generan por otras patologías neurológicas asociadas al estado de excitación de la persona que corre mientras huye o al uso de drogas, como anfetaminas o cocaína», aseguró la fundación en un comunicado.
Según explicó, la corriente eléctrica que aplica la TaserX26 es de 0,0021 amperios, que tiene una capacidad máxima de 50 mil voltios y el impulso es de 5 segundos.
«Es un dispositivo que, a pesar de su alto voltaje, tiene una corriente mínima de amperios. Eso es importante porque lo que produce la muerte no es el voltaje, sino el amperaje», precisó la Fundación.
De este modo, si se compara con un desfibrilador externo automático (DEA), la energía que genera el DEA es de 150 a 400 julios por pulso, mientras que las Taser X26 generan 0,36 julios por pulso, «lo cual es infinitamente menor», aseguró el comunicado.
A la vez, la FCA también desestimó que las pistolas Taser afecten a personas con marcapasos ya que, aunque precisó que «pueden generar algún tipo de inhibición o alteración temporal de funcionamiento», aclaró también que «no será mortal, ya que el impulso es de 5 segundos».
La Fundación explicó entonces que «lo que la pistola genera es una incapacitación electromuscular temporal, que impide que la persona pueda escapar o agredir».