Ludwin Flores Nole, un joven de 27 años, murió de un paro cardiorespiratorio, en una ambulancia rumbo al hospital, después de haber tomado un vaso de agua helada, lo que aparentemente desencadenó el trágico desenlace. Su fallecimiento se dio, además, luego de haber disputado un partido de fútbol amateur.
Flores Nole, jugador del equipo Los Rangers de Lima, Perú, decidió hidratarse con agua que estaba en la heladera. «Poco después sintió mal, con dolor en el pecho. Lo llevamos a una clínica, pero murió en el trayecto», le explicó su mujer al diario Perú 21.
«El médico nos dijo que sufrió un paro cardíaco fulminante”, continuó la esposa. Luego, explicó que el doctor le dijo que haber tomado agua fría con el cuerpo aún en altas temperaturas generó un «corte de digestión», un reflejo cardiovascular que llevó a una alteración del ritmo cardíaco.
Ante la observación médica fueron muchos los que no ocultaron su sorpresa ante el hecho de que una acción tan habitual como la de refrescarse después de hacer deporte desencadenara en la muerte. No se comunicó si el jugador tenía antecedentes cardíacos u de otro tipo.
Sus familiares y seres queridos expresaron el dolor por medio de las redes sociales. «Ustedes han hecho de nuestra tristeza la suya también y les quiero decir las gracias. Mil gracias a todos ustedes por sus palabras de aliento, ni en mis peores sueños pensé pasar por algo tan doloroso. De antemano les doy las gracias de parte mía y la de mi familia por el apoyo moral, espero seguir contando con ustedes hasta el último adiós de mi hermano», escribió su hermana Tatti en Facebook.