Una nueva edición de la Feria del Libro en la ciudad de Buenos Aires volvió a dejar tela para cortar. Una parte importante del público se dio vuelta justo cuando el secretario de Cultura de la Nación, Pablo Avelluto, daba su discurso. Un día después, Avelluto habló de lo sucedido y se mostró molesto con la organización.
«Me importa un reverendo pito que la gente se dé vuelta. No me importa nada«, comentó el secretario de Cultura sin ningún cuidado en el stand de Ticmas en la Feria, y agregó: «La gente tiene el derecho a opinar lo que quiera. Por mí, date vuelta. Por mí, andate. A mí me invitan porque represento al Estado nacional, porque represento al sector, porque he pasado 20 años en el sector, porque soy un expositor en esta Feria, porque vengo en representación del Presidente de la Nación, porque me aseguraron que se iban a dar las condiciones de seguridad para ser escuchados».
En contacto con Maria Laura Santillán, el secretario le trasladó la responsabilidad por la seguridad del evento a los organizadores de la Feria del Libro: «Ellos me habían asegurado que iba a estar todo controlado».
En relación a los manifestantes, manifestó: «Lo más doloroso es que aquellos que se manifestaron lo hicieron porque estaban en contra de un gobierno, de un partido o de alguna persona en particular. Y eso es un coqueteo con el autoritarismo y la intolerancia«, y agregó: «En las distintas Ferias del Libro en el mundo, que me ha tocado asistir por mi trabajo, no ocurre ésto que pasó ayer en la de Buenos Aires».
Finalmente, el secretario de Cultura habló sobre la presentación de Sinceramente, escrito por la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner y expresó: «Espero que sea pacífica».