El CEO de la petrolera YPF, Daniel González, admitió un «pequeño atraso hoy» en el valor de los combustibles, y consideró que «hay que tratar de ir acomodando los precios a la evolución de la economía», en función de la cotización internacional del barril de crudo y del tipo de cambio.
«Por supuesto, vivimos una realidad donde no tenemos la posibilidad de incrementarle el precio al consumidor, de manera tal que resulte una baja en la demanda», dijo González al participar esta mañana en la jornada Energía 2019, que se desarrolla en la ciudad de Neuquén.
González afirmó luego: «Estamos tratando de acompañar la realidad económica con acomodamientos graduales de precios, esa es la intención», y recordó que «lo mismo ocurrió el año pasado y con el tiempo lo fuimos graduando».
Durante la actividad, organizada por el diario «Río Negro», el CEO de YPF confió en una tendencia bajista de los combustibles «en la medida en que la producción de crudo crezca de la manera que esperamos».
Advirtió, sin embargo, que «necesitamos que el crudo en la Argentina se venda al precio internacional, y para eso se deben traspasar a precios» los valores del barril.
Sobre las perspectivas de crecimiento de la producción de hidrocarburos en la formación neuquina de Vaca Muerta, González sostuvo: «Estamos invirtiendo en la infraestructura necesaria para sostener el desarrollo de los próximos años».
«Es un desafío de todos, de la compañía con su gente, los contratistas, los sindicatos, los gobiernos a nivel provincial y municipal, cada uno tiene su parte», señaló.
González remarcó después: «No veo desafíos en cuanto al petróleo no convencional en la Argentina que no podamos afrontar: el futuro del shale oil es muy atractivo y estamos comprometidísimos».
Lo mismo, añadió, ocurre con el shale gas, y «a mediano plazo, no a cortísimo plazo, el futuro es igual de bueno que el del petróleo».
El CEO de YPF precisó que en el yacimiento El Orejano están «produciendo 5 millones de m³ diarios, y en Fortín de Piedra otros 16 o 17 millones de gas que antes no existía».
«El shale gas, como país, nos ha salvado, porque nos permitió sustituir las importaciones de GNL, y nos va a seguir salvando en el mediano plazo», proyectó el directivo de la petrolera con mayoría de capital estatal.
González consideró, sin embargo, que «en el corto plazo tenemos que seguir acomodando este exceso de oferta de gas que tenemos en determinados meses en el año», ya que con los precios a los que se vende en el verano no se puede desarrollar shale en gran escala.
El empresario indicó que el desarrollo de Vaca Muerta «sigue siendo incipiente», y rememoró que «el primer piloto grande lo empezamos en YPF en 2013».
«El año 2018 -remarcó González- fue el de quiebre en Vaca Muerta, que pasó de ser un sueño a ser una realidad, la productividad de los pozos mejoró notablemente y se consolidó la tendencia a la baja en los costos».
«En (el yacimiento de) Loma Campana cuesta alrededor de US$ 10 el barril desarrollar petróleo, que en el mercado internacional vale US$ 75; son números sumamente interesantes», concluyó González.