El empresario Gerardo Ferreyra, uno de los dueños de la empresa Electroingeniería, aseguró ante la Justicia que el fiscal Carlos Stornelli le dijo «si vos te arrepentís te vas inmediatamente en libertad y si no te arrepentís vas a la cárcel»
Ferreyra, quien se encuentra detenido en la causa que sigue el juez federal Claudio Bonadio por presuntas coimas en obras públicas se expresó de esa forma en una audiencia en la que declaró a través de una teleconferencia ante la Cámara de Casación penal, realizada el 11 de abril pasado.
La familia de Ferreyra difundió fragmentos de la declaración en la que el empresario indicó que fue «detenido luego de un allanamiento donde durante horas no encontraron absolutamente nada» y que «la inspección de la AFIP no encontró nada».
«Luego de estar incomunicado voy a comparecer frente al fiscal, el doctor Stornelli. Me dice: `Gerardo, yo tengo muy buenas referencias tuyas y de tu familia y en orden a eso quiero decirte cuáles son las reglas de juego de esta causa. Si vos te arrepentís te vas inmediatamente en libertad y si no te arrepentís vas a la cárcel`», dijo.
El empresario dijo que le preguntó al fiscal «de qué cosa» tendría que arrepentirse y relató: «y él me dice, de haber colaborado con estos mugrientos «.
«¿Cuáles mugrientos, Carlos? Y me dice `del matrimonio, los mugrientos, el matrimonio`. `¿Vos te referís a Néstor y a Cristina Jirchner?` `Sí, claro, a los mugrientos, me dice`», agregó. Ferreyra dijo que le respondió al fiscal que no tenía «nada» de qué arrepentirse.
«En principio participé de las licitaciones que ellos como administración ordenaron, gané algunas licitaciones importantes y otras perdí, bajamos como Electroingeniería 40 o 45 por ciento los valores de la grandes empresas que hasta ese momento hegemonizaban o cartelizaban el mercado», agregó.
Y señaló: «tampoco tengo por qué arrepentirme de que hayan entre otras cosas desendeudaron al país que es un beneficio para la Argentina, ahora estamos sufriendo lo contrario, precisamente».
Tras recordar que estuvo preso durante la última dictadura militar, indicó: «Nuevamente estoy en manos de una banda de extorsionadores que me detienen a mí para que me arrepienta y mostrar el escarnio de un arrepentido como figura de la principal obra de infraestructura energética durante los 12 años de la administración anterior».
«Por eso es que soy el único empresario detenido sin prueba alguna, sin ninguna condena, sin derecho a defensa y sin poder estar junto a mi familia defendiéndome, como me han defendido ellos hasta ahora», agregó.