Los vecinos de Cerrito al 1400 tuvieron este miércoles un despertar inusual. A diferencia de todos los días, en la puerta de sus hogares los esperaban un conjunto de actores, quienes haciéndose pasar por habituales residentes los convocaron a incorporar el hábito de barrer las veredas, una práctica que con la llegada del otoño se torna de suma importancia para la limpieza de la ciudad.
La actividad fue organizada por el Municipio, que a través de esta iniciativa busca visibilizar el aporte necesario de los vecinos en el barrido de las aceras. Más allá de las tareas de limpieza y mantenimiento que realizan las cuadrillas municipales, siempre es necesario el aporte ciudadano para tener una ciudad más ordenada. Cabe recordar que es responsabilidad de los vecinos frentistas mantener limpia la vereda de acuerdo a la Ordenanza Nº 7.600/2003.
Junto con la intervención artística, el Ejecutivo colocó cartelería alusiva a la campaña, del mismo modo que personal de la Dirección General de Higiene Urbana realizó tareas de divulgación y entrega folletería bajo puerta con los beneficios de mantener las veredas libres de hojas y residuos.
«A través de una intervención en la cotidianeidad de los ciudadanos y una posterior comunicación territorial, se procura visibilizar el aporte necesario de las rosarinas y los rosarinos en el barrido de las veredas durante la época de mayor caída de hojas», resaltó Luciano Marelli, a cargo del área de Higiene Urbana.
No hay que olvidar que las hojas de árboles, son un residuo orgánico y que puede utilizarse para producir compost, un abono natural de alto contenido de nutrientes. De esta forma se minimiza la cantidad de materiales que se envían al relleno sanitario.
«Se incentiva a todos a tomar una acción participativa, teniendo como premisa que cuando el compromiso se asume colectivamente, esta pequeña tarea diaria de barrer la vereda es transformadora, ayudando a mantener limpia la ciudad y evitar complicaciones en tiempos de lluvias y tormentas», continuó el funcionario.
Una ciudad más limpia
Es fundamental sobre todo en época de caída de hojas tener el hábito de barrer, embolsar y disponer correctamente estos residuos para tener una ciudad más limpia y evitar que se obstaculicen bocas de tormenta.
Además del barrido cotidiano, se solicita juntar y embolsar luego las hojas. Al mismo tiempo, se advierte que las mismas no deben quemarse, porque al ser incineradas liberan dióxido y monóxido de carbono, que son los gases causantes del efecto invernadero.
Con esta campaña, la Municipalidad continúa en la misma línea por la que años anteriores realizaron intervenciones con el sistema de recolección de verdes y voluminosos y este año con los deshechos de los perros y gatos en las plazas y parques.