El presidente estadounidense, Donald Trump, vetó hoy una resolución del Congreso norteamericano que disponía poner fin al apoyo militar que Washington brinda a Arabia Saudita en la guerra de Yemen.
«Esta resolución es un intento peligroso e innecesario de debilitar mis autoridades constitucionales, poniendo en peligro las vidas de ciudadanos estadounidenses y de valientes militares, tanto hoy como en el futuro», dijo Trump al vetar la medida.
La resolución había sido aprobada en la Cámara de Representantes en abril y en el Senado en marzo y era la primera vez que ambas cámaras apoyaban una resolución que limita el accionar de Trump como comandante en jefe.
Ni la mayoría demócrata en Representantes ni la mayoría republicana en el Senado cuentan con los votos necesarios para anular el veto, que requiere mayorías de dos terceras partes en ambas cámaras.
«La resolución -explicó Trump citado por la agencia de noticias EFE- es innecesaria porque, más allá de las operaciones antiterroristas contra Al Qaeda en la Península Arábiga y el Estado Islámico (EI), Estados Unidos no participa de las hostilidades en el Yemen».
No hay militares estadounidenses «comandando, participando o acompañando» a las fuerzas de la coalición saudita que combaten a los rebeldes hutíes en el Yemen, insistió.
Se trata del segundo veto de Trump en sus más de dos años en la Casa Blanca, después de que el mes pasado ya vetó la resolución del Legislativo contra la emergencia nacional que declaró para construir el muro fronterizo con México.
En el caso de la resolución sobre el Yemen, la Cámara Baja aprobó la medida a principios de mes por 245 votos a favor contra 175, mientras que el Senado hizo la propio semanas antes por 54 votos afirmativos y 46 negativos.
La resolución del Legislativo requería a Trump que pusiese fin a la implicación militar de Estados Unidos en el Yemen con la excepción de las operaciones antiterroristas contra Al Qaeda.
La medida logró el apoyo de la mayoría de los legisladores tras el asesinato del periodista saudita Jamal Khashoggi el pasado 2 de octubre en el consulado de su país en Estambul.
Khashoggi fue asesinado por agentes sauditas llegados desde Riad, algunos cercanos al príncipe heredero, Mohamed bin Salmán, lo que generó un gran rechazo internacional.
Trump, sin embargo, defendió a Riad como un gran aliado en la región y se ha opuesto a que el asesinato de Khashoggi cambie las relaciones entre ambos países.
La coalición árabe apoyada por Estados Unidos entró en el conflicto de Yemen en marzo de 2015, momento en el que se recrudeció la guerra que causó la peor crisis humanitaria del mundo, según la ONU.