Por Enrique Genovar

Nada de nada: Cocca erra y un mal plantel no le responde


Por Enrique Genovar

Ya se escribió casi todo de este Central en lo que va del año. Y por más o menos coincidencias que haya todas las opiniones encajan en este magro presente. Pero ya es hora de analizar el trabajo de Diego Cocca. Es que ya se conoce que los directivos son los principales responsables de este momento y que hay jugadores que les está quedando grande la camiseta.

El cuerpo técnico aceptó dirigir a este plantel y ya es responsable de lo que sus futbolistas hacen o dejan de hacer dentro del campo de juego.

Sólo le ha ganado a Argentinos. Luego, todo lo que jugó lo perdió. Pero más allá de los resultados, lo que no se alcanza a ver es una idea de juego definida. Encima las estrategias de preservar varios jugadores de acuerdo al partido siguiente no tiene una lógica.

¿A qué juega el Central de Cocca? El DT dijo que quería un equipo intenso, que sea protagonista que salga a jugar todos los partidos de igual a igual independientemente del dónde y cuándo.

Lo cierto es que nada de esto se ve. La intensidad no se construye de un día para otro, pero hoy no se ve. Protagonista tampoco lo es. De hecho, si lo fuera no hubiera venido Aldosivi y se hubiera llevado no solamente la ventaja en el marcador sino la sensación que pudiera haberlo goleado. Y este Central tampoco juega los partidos de igual a igual y esto es decisión del entrenador. Un ejemplo claro y concreto es que a Brasil no fue con lo mejor, ante el Tiburón puso todo; y ambos partidos terminaron con el mismo resultado y tuvieron la misma forma.

Un plus a esta situación paupérrima son los cambios que hizo el entrenador en varios de los encuentros. No se entiende ir perdiendo y sacar un hombre de ofensiva para poner un defensor o reemplazar a un lateral por otro.

Quedan partidos importantes por delante. Y da toda la sensación de que el equipo de Cocca tendrá que mostrar algo si no quiere seguir padeciendo el semestre. Central no puede jugar como juega y no para de sumar fracasos. El cuerpo técnico necesita que su trabajo, porque nadie niega que están muy dedicados a las tareas, se vea reflejado en el campo de juego; ya que hasta aquí no se vio nada de nada.