Profesionales vinculados al área de salud aportan su sabiduría en la Casa de la Pediatría Rural en el paraje Las Hacheras. Conocé un poco más de su historia
Por Diego Carballido
Un grupo de profesionales rosarinos vinculados al área de la salud decidieron, hace más de quince años, seguir el ejemplo de profesionales emblemáticos como el Dr. Maradona y Salvador Mazza. Para eso, viajaron a una de las zonas históricamente más postergadas de Argentina para ofrecer sus servicios a las decenas de necesidades presentes en el lugar.
El paraje Las Hacheras, a unos 40 kilómetros de Miraflores y a unos 80 kilómetros de Castelli, en la provincia del Chaco, forma parte de lo que se conoce como “El Impenetrable”. Hasta ese lugar, habitado principalmente por comunidades de pueblos originarios, se dirigen todos los meses este grupo de profesionales que forman parte de la asociación “La Higuera”, bajo la dirección de uno de los precursores de esta iniciativa: el doctor Gustavo Farrugia.
«La Higuera está compuesta por muchos profesionales relacionados al área de la salud», contó Nicolás Nocino, coordinador del Centro Nutricional que esta asociación tiene en el Chaco, en diálogo con CLG.
“La acción de La Higuera en un comienzo fue itinerante, pero desde el año 2012 estamos asentados en la Casa de la Pediatría Rural en el paraje Las Hacheras. Allí, hay un puesto de salud que depende del gobierno chaqueño que trabaja en forma coordinada con la casa de nuestra asociación, donde funciona un dispensario con atención primaria y un centro nutricional”, explicó Nocino al referirse al espacio donde se dirigen cada mes para desempeñar su tarea como profesional, pero también el lugar donde tienen un contacto cercano con los habitantes de la zona. «Se busca fortalecer los vínculos con los vecinos. Por eso, contamos con un salón de reuniones donde se realizan asambleas todos los meses y se redactan cartas con diferentes pedidos a las autoridades correspondientes», contó Nocino.
Actualmente, “La Higuera” es asistencia en territorio pero también se convirtió en un lugar de capacitación avalado por la Universidad Nacional de Rosario para quienes desean acompañar en esta noble tarea de asistir a quienes más lo necesitan en el norte del país.
“Como una utopía para los que ejercíamos la docencia, un grupo de jóvenes médicos y estudiantes, transgrediendo las normas académicas, hegemónicas y a escondidas de las autoridades universitarias de ese 2001 nos planteamos formular un sistema de formación permanente donde las prácticas del cursado de los sistemas de formación contemplen las áreas rurales, las más aisladas y así fue como elegimos el norte de nuestro país”, explica “La Higuera” en su página web los orígenes de lo que hoy constituyen los Postítulos en Medicina Rural que se realizan en la Facultad de Medicina y las escuelas de producción agrícola que funcionan en su Casa de la Pediatría Rural, en el Chaco.
Al respecto, Nocino amplió: “Existe en la facultad una capacitación de dos años y es con especialización en medicina rural. Incluye una formación teórica con viajes al Impenetrable chaqueño donde se prepara al estudiante desde un punto de vista sociológico y antropológico”.
Todos los integrantes de “La Higuera” viajan todos los meses al territorio en forma rotativa, de manera que cuando regresa un grupo parte automáticamente otro equipo para suplantarlo. Por lo tanto, todos pasan una parte del mes en la ciudad y otra parte en el Impenetrable.
«Constantemente te traes visiones diferentes de la zona debido al permanente contacto con los habitantes del lugar», compartió Nocino y advirtió que no se trata de una experiencia sencilla ya que en «muchos hogares no ha llegado la red de gas, no hay teléfono, no hay energía eléctrica y las cuestiones de salud son mínimas. La gente depende mucho de que el médico se acerque hasta el paraje».
Urgencias
«Son muchas las preocupaciones a nivel sanitario, como por ejemplo, la escasez de agua potable, los embarazos adolescentes, la violencia familiar y social o el consumo de alcohol en exceso. En particular, a mí me preocupa la malnutrición de muchos niños y de los adultos, ya sea producida por la falta de alimentación o por el alto consumo de harinas y azucares», expresó Nocino y agregó que en una visión más generalizada también existen otras problemáticas irresueltas como “el acceso a las tierras, la educación, el estado de los caminos, la falta de transporte, entre otras cuestiones que todavía funcionan como en el siglo XIX».
Por tal motivo, desde «La Higuera» piden el apoyo permanente de donaciones que permitan palear las innumerables necesidades presentes en este paraje chaqueño. «Aceptamos todo tipo de alimentos no perecederos y productos de limpieza para llevarlos a nuestra Casa de la Pediatría Rural”, concluyó Nocino.
Todos los interesados pueden acercar sus donaciones los días lunes, miércoles y viernes de 16 a 19 en la sede de “La Higuera” en Cerrito 3231 o se pueden comunicar al 0341 – 459 9910.
