El presidente de la Comisión Europea, Jean Claude Juncker, advirtió que extender el Brexit hasta el próximo 22 de mayo no será una opción posible si el Parlamento británico no aprueba antes del 12 de abril el acuerdo de salida que ya fue rechazado en tres ocasiones.
«Si no se ha hecho para entonces, no será posible ninguna otra extensión. Tras el 12 de abril nos arriesgamos a poner en peligro las elecciones al Parlamento Europeo, y por tanto amenazamos el funcionamiento de la Unión Europea», sentenció Juncker ante el pleno de la Eurocámara en Bruselas.
La fecha elegida responde al plazo dado a Londres para informar si participará en las elecciones europeas. «Si el Reino Unido está en una posición de aprobar el acuerdo de salida con una mayoría viable para el 12 de abril, la UE en ese caso debería aceptar una extensión hasta el 22 de mayo», agregó Juncker, citado por la agencia de noticias EFE.
No obstante, la decisión última de conceder una extensión corresponde a los Veintisiete, que se reunirán en una cumbre extraordinaria el 10 de abril para abordar este asunto. La primera ministra británica, Theresa May, había anunciado este lunes que solicitaría una nueva prórroga tan corta «como sea posible» para tratar de acordar con la oposición una vía de salida de la Unión Europea que cuente con un respaldo mayoritario.
Las palabras de Juncker apuntan a que este acuerdo transpartidario debe llegar en los próximos días y, según dijeron el pasado viernes fuentes europeas, «con bastante antelación» respecto a la cumbre del 10 de abril para que los líderes de los Veintisiete sepan qué propuesta británica deben considerar al tomar su decisión sobre la extensión.
Juncker insistió en que la Unión Europea está preparada para dar «un cierto grado de flexibilidad» a sus intenciones para la futura relación entre la UE y el Reino Unido, la llamada declaración política, después de que en los últimos días haya ganado fuerza entre los diputados británicos la posibilidad de negociar con la UE la entrada en una unión aduanera.
Sin embargo, afirmó que una salida sin acuerdo el próximo viernes «se ha convertido en un escenario cada vez más probable» y dijo que la UE está preparada para afrontar esta situación.
En ese caso, señaló Juncker, Londres deberá afrontar los tres principales asuntos de la separación: los derechos de los ciudadanos, la factura de la separación y los compromisos financieros y la cuestión de la frontera entre Irlanda e Irlanda del Norte. «Un ‘no acuerdo’ no significa ‘no compromisos’. Estos tres asuntos no van a desaparecer. Serán una condición estricta para reconstruir la confianza y para empezar a hablar del futuro», advirtió Juncker.
Los Veintisiete escucharán las «intenciones» de May el 10 de abril en su cumbre extraordinaria y tendrán entonces en sus manos la decisión -que debe ser tomada por unanimidad- de conceder o no una nueva prórroga al Brexit, sin la cual la salida sin acuerdo se producirá por defecto el próximo viernes 12 de abril.