Paulo Ferrari no dudó en calificar este momento de su vida como “el desafío más importante”. Y lo es para todo el mundo Central. El Loncho se calzará el buzo de DT en un momento caliente para el conjunto canalla, en el que se si no suma puntos tendrá un segundo semestre de 2019 con demasiadas obligaciones en cuanto a los promedios, algo que hoy parece estar dejando de lado a nada menos que a la Copa Libertadores.
El ex capitán dirigió su primera práctica y este martes ya saltará a la cancha, o más precisamente al banco de suplentes, cuando su equipo se enfrente a Sol de Mayo de Biedma, por los 32avos de final de la Copa Argentina, en la cancha de Colón de Santa Fe.
“Fue todo muy rápido y repentino. Pero la verdad es que estoy muy contento de estar acá. Lo tomo con mucha alegría y tranquilidad. Las cosas se presentan cuando se tienen que presentar, y estoy enfrentando el desafío más importante de mi vida, sin lugar a dudas”, sentenció el flamante director técnico.
«Estoy muy bien. En estos días de entrenamiento vi a los jugadores muy bien y me dieron mucha confianza. Tenemos muchos partidos y no mucho tiempo. Hay que trabajar”, apuntó el Loncho.
Bauza fue despedido el pasado sábado, y horas después, la comisión directiva de Central anunciaba la llegada de Ferrari. «Los jugadores están dolidos por la salida del Patón, era muy querido por todos. Pero también saben que ya tienen que reponerse y enfrentar todos los desafíos que tenemos por delante», dijo en referencia a la salida del ídolo canalla.
«Vamos a tratar de poner un equipo que salga a proponer, mi idea es tener un equipo que tenga dominio de pelota, buen juego y sobre todo que sea agresivo”, explicó, consultado acerca de cómo jugará su Central. Las pruebas estarán a la vista, claro, este martes ante Sol de Mayo. Si bien el equipo de Biedma es decididamente inferior al Canalla, el conjunto del Loncho mostrará sus primeras credenciales.