Las elecciones generales de Nigeria previstas para este sábado fueron aplazadas una semana por la Comisión Electoral. La decisión fue tomada apenas cinco horas antes de que se abrieran los centros de votación lo que sorprendió a los electores y fue criticada por los candidatos.
La Comisión Electoral Nacional Independiente (CENI) informó esta madrugada que los comicios en la primera economía de África y el país más poblado de ese continente se atrasaban una semana por problemas logísticos.
“Tras una cuidadosa revisión de la implementación del plan logístico y operacional, y dada la determinación de realizar elecciones libres, justas y creíbles, la Comisión llegó a la conclusión de que proceder con las elecciones según lo programado no es posible”, afirmó el presidente de la CENI, Mahmood Yakubum, informó la agencia de noticias EFE.
En consecuencia, la comisión electoral reprogramó las elecciones presidenciales y de la Asamblea Nacional (Parlamento) para el próximo 23 de febrero, y las que renovarán el Consejo de Gobernadores, las Cámaras Estatales y el Consejo del Territorio de la Capital Federal -previstas en principio el 2 de marzo- para el 9 de marzo.
“Esta es una decisión difícil de tomar para la Comisión, pero necesaria para el desarrollo exitoso de las elecciones y la consolidación de nuestra democracia”, subrayó Yakubu a los medios tras una reunión de emergencia en la sede del organismo en Abuya, la capital nigeriana.
La inesperada medida ofrece “la oportunidad de atajar desafíos identificados para mantener la calidad de nuestros comicios”, agregó sin dar más detalles.
Más de 84 millones de nigerianos estaban hoy llamados a las urnas para celebrar las sextas elecciones democráticas de su país, en las que el actual presidente, Muhammadu Buhari, buscaba la reelección pese a las duras críticas a sus cuatro años de mandato.
Buhari dijo que estaba “profundamente decepcionado” después de que la comisión electoral “le había dado garantías, día tras día y casi hora tras hora, de que estaban en total disposición para las elecciones. “Nosotros y todos nuestros ciudadanos les creímos”.
Su declaración hizo un llamado a la calma de los nigerianos durante el “momento difícil en nuestro camino democrático” y destacó que su administración no interfiere en el trabajo de la comisión.
Por su parte, el opositor Partido Democrático Popular (PDP) acusó a Buhari, líder del gobernante Congreso de Todos los Progresistas (APC), de estar detrás del aplazamiento de las elecciones.
“Al instigar este aplazamiento, el Gobierno de Buhari espera privar de sus derechos al electorado con el propósito de asegurarse una baja participación en la nueva fecha”, denunció el candidato presidencial por el PDP, Atiku Abubakar, en una declaración leída por su asesor de comunicación.