La sangre proveniente del cordón umbilical es considerada «muy rica en células madre» y los especialistas destacan que tiene una aplicación práctica que es «el trasplante».
Así lo explicó el bioquímico, Orlando Etchegoyen, director del Laboratorio de Procesamiento y Criopreservación de BCU Bioprocrearte, quien destacó que la guarda de células del cordón umbilical no significa necesariamente tener un «seguro biológico» pero sí una posibilidad más de tratar con éxito una enfermedad.
«La sangre del cordón es muy rica en células madre y tiene una aplicación práctica que es el trasplante, con potencialidades futuras de curar enfermedades. Guardar células no significa contar con un seguro biológico, pero sí una posibilidad más de tratar con éxito una enfermedad. Es como meter un poco de salud en la máquina del tiempo», señaló el especialista.
Además, el bioquímico afirmó que «acá no hay lugar para el debate ético o religioso porque es un tejido que se tira a la basura».
Etchegoyen detalló cómo es el proceso de guarda de sangre y tejido del cordón umbilical: «en el momento de parto, una vez que el bebé va a manos del neonatólogo, se comienza con la colecta de sangre que dura 10 minutos».
«Luego, una vez que se produce el alumbramiento, se corta todo el cordón y se coloca en un frasco con un medio de transporte.
Antes de las 48 horas va al laboratorio y se coloca a menos 196 grados centígrados. Al cordón se lo secciona y se hace digestión parcial y se criopreserva también en nitrógeno», agregó.
El experto manifestó que «para la liberación se necesita una prescripción médica y saber a qué institución se va a llevar para hacer el descongelamiento».
Aseguró que «con esta práctica no se asume ningún riesgo porque se trata de un tejido que se desecha y que no provoca daño al bebé, ni a la mamá».