Por Alberto Botto (*)
En los últimos días, en muchas partes del país, se han producido situaciones que han dejado al descubierto el fracaso de la política energética nacional llevada adelante por el gobierno. Aumento de los combustibles nuevamente por parte de algunas petroleras, apagones prolongadísimos en muchas ciudades y la razonable contrariedad de la gente por los aumentos de tarifas en todos los servicios, son algunas de estas situaciones. Los contribuyentes deben tener claro un hecho incontrastable: la quita de subsidios por parte del gobierno nacional y las acciones realizadas en materia energética son, lamentablemente, las causales de esta situación.
La cuestionable política del no al subsidio
En un contexto de pobreza estructural, de pérdida del poder adquisitivo, de parálisis de la economía interna, de medidas económicas desafortunadas que han agravado el desempleo y la crisis social, era imposible que no se produjeran estos hechos a partir del retiro de subsidios. No hay bonanza económica como para que la sociedad en su conjunto pueda soportar una medida de gobierno como restringir los subsidios, medida que, por otra parte, es la responsable del aumento de las tarifas eléctricas en muchas provincias, por cuanto debe saberse que algunas de éstas, como el caso de Santa Fe, “no generan energía, solo la compran al Estado nacional”.
En este punto, cabe destacar que los países más desarrollados del mundo (y esto ratificado por el propio FMI) son los que subsidian energía. En el año 2015, por ejemplo, Norteamérica subsidiaba más de 2.000 dólares per cápita por año y Argentina apenas 400 dólares. De modo tal que es poco serio expresar, como ha sostenido el gobierno, que pagar sin subsidios es devolverle al ciudadano argentino la dignidad de pagar lo que corresponde sin subvención estatal.
En la provincia de Santa Fe, y en la ciudad de Rosario muy especialmente, a pesar de la gran cantidad de nuevos usuarios del servicio eléctrico y no obstante los calores abrumadores, el servicio se ha prestado casi con absoluta normalidad. Es cierto que se han producido cortes, pero no han sido, de ningún modo, de la magnitud como los que se vivieron en otros puntos del país
El compromiso de los trabajadores
Esto se debe a dos factores esenciales: por un lado, las inversiones realizadas en los últimos años en la red eléctrica santafesina, y en este caso rosarina, y por otro al trabajo realizado por todos los trabajadores de Luz y Fuerza, quienes, a cada instante, en todas las condiciones climáticas existentes y aun a riesgo de su propia vida en muchos casos, han acudido y siguen acudiendo rápidamente a solucionar los problemas que se presentan. Lo han hecho con profesionalismo y entrega tanto en las redes de alta tensión aéreas como de baja tensión subterráneas. Colgados de las torres bajo la lluvia, cavando zanjas bajo un sol abrasador, en un escritorio, en las cuadrillas, conduciendo un vehículo, atendiendo al público y procurando dar solución a los problemas que se presentan. En fin, en todos los lugares de trabajo.
Lamentablemente, los medios hegemónicos al servicio del poder, en torno de la energía, de las políticas aplicadas y de la realidad de los trabajadores del sector, no han informado ni informan correctamente, y existe un gran desconocimiento de la realidad del sector que, indudablemente, beneficia al poder.
Es por esto que habida cuenta de la situación planteada en materia energética en todo el territorio nacional, es necesario destacar la aceptable situación en la ciudad de Rosario y en la provincia de Santa Fe en materia de energía eléctrica, demostrándose así que no es verdad que el Estado y las empresas estatales no están en condiciones de brindar un buen servicio; sin dejar de reconocer, por supuesto, que seguramente hay mucho por mejorar.
Por otra parte, y para concluir, me permito felicitar a los compañeros trabajadores de Luz y Fuerza, por el compromiso asumido en favor de los usuarios del servicio eléctrico y por la adhesión permanente a la campaña solidaria en el orden social que se realiza siempre.
(*) Secretario General del Sindicato de Luz y Fuerza de Rosario