Tomadores de créditos UVA autoconvocados de Rosario y la región se reunieron con la diputada nacional Lucila De Ponti y el concejal Eduardo Toniolli, para exponer su problemática y buscar opciones que permitan pagar los créditos hipotecarios que tomaron en los últimos dos años, y cuya tasa de interés alcanzó el año pasado un 47,8% de aumento. Los “Hipotecados UVA” calculan que este año las cuotas se incrementarán en un preocupante 42%.
“Nosotros no somos inversores, ni compramos ni vendemos propiedades, simplemente queríamos cumplir el sueño de la casa propia y terminamos estafados”, sostuvo Diego González, de los autoconvocados, y afirmó que “con la inflación desmedida, uno termina debiendo más de lo que valen las propiedades en sí.”
“Hay dos proyectos en la Cámara de Diputados para que los intereses del crédito pasen a regirse por el índice salarial y no el de inflación, pero el oficialismo no les da curso, porque quieren vender las hipotecas, y si cambian el contrato no pueden hacerlo”, explicó González, y agregó: “estamos realizando reuniones con legisladores de distintos espacios políticos, para intercambiar pareceres que permitan construir una salida a este laberinto en el que nos vimos atrapados”.
Tras escuchar a los vecinos, el concejal Toniolli afirmó que el gobierno de Macri “demuestra su carácter antipopular cuando subsidia a las corporaciones energéticas para resarcirlas por la brutal devaluación, o le permite aumentar las tarifas a las empresas de peajes con el mismo objetivo, y por otro lado deja libradas a su suerte a las familias que destinaron los ahorros de una vida para obtener su vivienda única, y hoy se encuentran en una encerrona frente los intereses usurarios de estos créditos”.
Por su parte, De Ponti apuntó: “El gobierno tiene que hacerse cargo de ofrecer oportunidades viables para que las familias puedan pagar la cuota de los créditos uva, les aseguraron que la cuota nunca iba a superar el 25% de sus ingresos y hoy está muy por encima de ese monto”. “El sueño de la casa propia no puede convertirse en una condena de por vida, los derechos de los argentinos tienen que estar por encima de las ganancias de los bancos”, sintetizó la diputada.
Los así llamados “Créditos UVA” son una política del gobierno nacional que vino a reemplazar al PROCREAR. El crédito se otorga en UVAs (Unidad de Valor Adquisitivo) y no en pesos, lo que establece modificaciones en el interés dependiendo de la evolución del índice de la construcción, el precio del dólar y la inflación. Con la suba descontrolada de estos factores, los tomadores de estos créditos vieron subir el precio de las cuotas en un 47,8% en sólo un año.