El padre de Carla Soggiu, la joven de 28 años hallada muerta ayer en el Riachuelo, dijo hoy que su hija «no estaba fuerte», motivo por el que pudo no haber salido del río y se ahogó.
Por su parte, Nora, la tía de Carla, dijo esta tarde a Télam que el resultado preliminar de la autopsia reveló que su sobrina murió por «asfixia mecánica por sumersión» y que la familia espera que en las próximas horas le entreguen el cuerpo para poder comenzar el velatorio.
Nora también contó que ella y su esposo Gustavo fueron quienes ayer reconocieron formalmente el cuerpo de Carla en la Morgue Judicial porteña, donde le informaron que la joven se había ahogado.
Por último, la tía añadió que la familia evaluaba contratar un abogado particular para ser parte de la investigación judicial que continúa.
En tanto, Alfredo Soggiu, padre de la joven fallecida, dijo esta mañana que buscará determinar si la situación en la que se encontraba su hija al momento de su muerte ocurrió a raíz de los golpes que había sufrido por parte de su ex pareja, sumado a una «mala alimentación y al estrés».
«Creo que estaba muy confundida, mi hija no estaba fuerte porque se venía alimentando muy mal», sostuvo el hombre en declaraciones al canal C5N.
Para Alfredo, su hija caminó cinco cuadras y llegó «a la vera del Riachuelo por algún pasadizo», tras lo cual pudo haber sufrido «un problema con la válvula» de drenaje que tenía colocada en la cabeza por la hidrocefalia que padeció.
«Hasta hace un tiempito estaba bien», señaló el hombre y agregó que el 26 de diciembre «sufrió este hecho de violencia» -en referencia al ataque de su ex pareja- y ahora ella «no está más».
Alfredo descartó también que Carla haya querido suicidarse y aclaró que ella «no sabía nadar».
«Necesito que un especialista me diga si los golpes que sufrió sumado a la mala alimentación y al estrés la llevaron a esta situación (…) Es mucho para una persona», concluyó entre lágrimas.
El cuerpo de Carla fue encontrado ayer cerca de las 6.30 por un grupo de trabajadores que realizaba una limpieza en el Riachuelo, por lo que avisaron a la Prefectura Naval Argentina y a la Policía de la Ciudad de Buenos Aires.
De acuerdo a uno de los empleados que encontraron el cadáver, éste se encontraba flotando boca abajo.
Carla, madre de dos hijos, desapareció el martes pasado luego de accionar dos veces el botón antipánico que tenía desde fines de diciembre, cuando denunció a su ex pareja, identificada como Sergio Fuentes, por violencia de género.
De hecho, a raíz de esa denuncia, Fuentes se encuentra detenido con prisión preventiva en el penal de Marcos Paz e imputado de los delitos de «abuso, lesiones, y privación ilegítima de la libertad».
A su vez, los familiares de la joven denunciaron que los padres y la hermana mayor del detenido comenzaron a acosarla por haber acusado a su ex pareja.
Mientras se desarrollaba la búsqueda de Carla, la Policía de la Ciudad revisó las cámaras de seguridad de la zona y determinó que la joven, al salir de su trabajo el martes último, subió a un colectivo de la línea 32, entre las 18 y las 18.30 en avenida Sáenz al 500.
Según el padre de Carla, ésta pudo haberse confundido y terminado a la vera del Riachuelo, de donde no pudo salir porque había «llovido y estaba fangoso».
Además, los pesquisas determinaron que la joven ese mismo día a las 21.07, tras activar el botón antipánico, llamó a la Central de Alarmas de la Policía de la Ciudad y dijo que estaba «sentada sobre barro» y con «la cara tapada».
«Me perdí», dijo Carla en un momento de su diálogo de 48 segundos con la operadora.