Entre la noche del jueves y la madrugada de este domingo, 76 vehículos debieron ser trasladados al corralón municipal producto de las tareas de control efectuadas entre la Secretaría de Control y la Policía.
A lo largo del fin de semana se realizaron en Rosario 470 intervenciones en operativos nocturnos. Se constataron la documentación y los elementos de seguridad, además de las condiciones de conducción.
Diferentes faltas cometidas por los conductores fueron la causa para que 76 vehículos fueran llevado al depósito municipal. De esos casos, hubo 47 que fueron por alcoholemia.
El nivel más alto registrado según fuentes oficiales fue de 2.56 en la madrugada del domingo. Además, hubo control de narcolemia que dio negativo.