Por José Odisio Newell’s pide un técnico a gritos. El interinato de Bidoglio fue efectivo y trajo oxígeno en un momento complicado, pero la Lepra no está para experimentar con un DT sin experiencia y por eso la dirigencia no duda en buscar a Eduardo Domínguez y Diego Cocca, aunque ninguna de las negociaciones parece sencilla. Cocca es caro. Al menos eso se desprende de las charlas de los directivos con Bragarnik. Obviamente el DT deberá bajar pretensiones si acepta venir al Parque, aunque la sensación es que su representante hace más fuerza que él para que sea el elegido. Es lógico. Newell’s es una vidriera para cualquier entrenador. Y si bien está judicializado, no le sobra la plata y la tabla de promedios futura apremia, para Bragarnik desembarcar en el Parque es tentador. Y la necesidad hace que los directivos analicen con seriedad algo que hace un año parecía mala palabra. Hoy hay que dejar algunos principios de lado y si alguien aporta un buen DT con refuerzos de calidad no se le puede cerrar la puerta. Domínguez, en cambio, tiene mejor imagen con los hinchas. Su personalidad y sus buenas experiencias en Huracán y Colón ayudan. Pero también eso juega en contra, ya que el DT no termina de convencerse en venir al Parque, mucho más al saber que no será sencillo sumar refuerzos de prestigio. Y está esperando alguna otra propuesta. Los tiempis de Domínguez no coinciden con los de Newell’s. Detrás de estos nombres hoy no hay nada. Pablo Lavallén es una opción que hoy puede tener la misma validez que mantener a Bidoglio. Y eso no suena lógico. Y si bien pueden aparecer otros candidatos, estirar no es recomendable.]]>
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Por José Odisio