El Comité Olímpico Internacional (COI) realiza una investigación sobre la controvertida federación internacional de boxeo (Aiba). Por este motivo, comunicó el viernes la decisión de «congelar la organización del torneo» de la disciplina en Tokio 2020.
«Los contactos oficiales entre la Aiba y el Comité de Organización de Tokio-2020, la venta de entradas, la aprobación e implementación del sistema de clasificación, la planificación de pruebas y la finalización del programa de competición» quedan por lo tantos suspendidos, precisó la comisión ejecutiva del COI en un comunicado.
La investigación «puede llevar al retiro del reconocimiento de la Aiba» por el organismo olímpico, precisó el COI, señalando «varios motivos de gran preocupación» en relación a las finanzas así como a la gobernación y la ética de la organización. A pesar de estas medidas, promete «hacer todo lo posible para proteger a los deportistas y asegurar que tenga lugar un torneo de boxeo» en los Juegos de Tokio.
El boxeo, deporte histórico de los Juegos, ya provocó la ira del COI en 2016 en Rio, donde 36 oficiales y árbitros fueron suspendidos. Y las relaciones no han mejorado con la elección del hombre de negocios uzbeco Gafur Rakhimov al frente de la Aiba a principios de noviembre. Rakhimov está acusado de ser un «criminal mayor» de su país por el Tesoro estadounidense, lo que él niega categóricamente.
Antes de la decisión de este viernes el COI ya había suspendido sus relaciones con la Aiba y congelado las ayudas financieras que le había proporcionado anteriormente.