El príncipe heredero de Arabia Saudita, Mohamed bin Salman, sindicado de haber ordenado el asesinato del periodista Jamal Khashoggi, desembarcará en la Ciudad de Buenos Aires para asistir a la cumbre del G20.
Así lo confirmó el ministro de Energía saudí, Jaled al Faleh, en una rueda de prensa retransmitida por la televisión Al Arabiya, informó la agencia internacional EFE.
Según se indicó, el príncipe heredero asistirá a la Cumbre de Líderes del G20 que se realizará entre el 30 de noviembre y el 1 de diciembre en el marco de una gira que realizará en la región, aunque no se especificó qué países incluirá.
La cumbre de Jefes de Estado se realizará en el predio de Costa Salguero y asistirán líderes políticos de todo el mundo, entre ellos los presidentes de Estados Unidos, Donald Trump; de Francia, Emmanuel Macron; de Rusia, Vladimir Putin; de China, Xi Jinping; así como la primera ministra británica, Theresa May, y la canciller alemana, Angela Merkel.
La semana pasada, el fiscal general saudita había pedido la pena de muerte para cinco acusados en el caso del asesinato del periodista Jamal Khashoggi, «drogado, asesinado y descuartizado» en el consulado saudita de Estambul, pero eximió de toda culpa al poderoso príncipe heredero.
El asesinato el 2 de octubre de este periodista, crítico del poder saudita y colaborador -entre otros- del Washington Post, se convirtió en un escándalo internacional y la CIA concluyó que el príncipe heredero de Arabia Saudita había encargado su homicidio.
El periodista ingresó el 2 de octubre al consulado saudí en Estambul para realizar unos trámites y nunca salió vivo: el fiscal general saudí dijo que Khashoggi fue drogado, asesinado y desmembrado en el local diplomático.
Por su lado el ministro saudí de Exteriores Adel Al Jubeir dijo a la prensa que el príncipe heredero no tiene «nada que ver» con el asesinato de Khasshoggi.