La pintada blanca es una técnica que tiene propósitos específicos
Seguramente muchas veces notaste, de lejos o de cerca, que los troncos de distintos árboles estaban pintados de blanco. En contraste con su color marrón clásico, ya sea claro u oscuro, el blanco saltaba enseguida a la vista.
Algo que muchas personas conocen es que esa pintada evita que las plagas se apoderen de los árboles, o que las hormigas se suban a él para llevarse la cena. Sin embargo, hay otros motivos detrás de esta práctica que se repite en distintos países.
Cuando los árboles se visten de blanco
La pintada blanca es una técnica que tiene propósitos específicos. Más allá de que pueda parecer algo estético, en realidad la práctica se realiza tanto en zonas urbanas como rurales, donde no hay tanta presencia humana.
Además de proteger a los árboles de plagas e insectos, uno de los objetivos principales es evitar que sufran la radiación solar. Cuando un ejemplar es joven, está más expuesto a sufrir quemaduras solares ya que su corteza es más delgada. Y ahí es donde entra en acción la pintada: al crear una barrera física, lo protege de los rayos del sol, al igual que nos sucede a nosotros cuando nos ponemos protector solar sobre la piel.
Por otro lado, la pintura blanca sirve también como barrera ante las temperaturas extremas, ya sea en estaciones frías o calurosas. Al hacer de aislante, regula la temperatura de la corteza y previene que se dañe cuando hace mucho frío o mucho calor.
Un último beneficio, quizás el menos conocido, es que se modifica el pH (potencial de hidrógeno) del suelo gracias a la pintura que cae. La lluvia o el riego pueden lavarla, y al alcanzar la base del tronco, nutre la tierra y mejora las condiciones naturales para que el árbol se desarrolle.
¿Qué material se utiliza y cuáles son los recaudos a tener en cuenta?
La pintada blanca en realidad se conoce como “encalado”, y su nombre deriva precisamente de la cal. Este es un material creado a partir del calcio, el hidróxido de calcio Ca(OH)2, que se aplica como si fuera pintura.
Aunque muchas veces también se acostumbra a poner una solución artificial rebajada con mucha agua, en realidad se recomienda siempre usar aquella deriva de cal porque resulta más natural para los árboles. Por ello, además de tener en cuenta el tipo de pintura, hay que saber que:
- Sólo se requiere una capa de pintura.
- No debe superarse el metro de cada tronco, empezando desde la base.
- Se debe aplicar principalmente en árboles jóvenes.
- Puede aprovecharse, más que nada, en árboles frutales que son los que más sufren las plagas.
- El encalado puede ocultar la presencia de plagas que sean del mismo color, es decir blanco.